Coll del Vent, lugar evocador que se divisa desde la cima de las paredes de Montrebei, contrapunto en conglomerado a la exquisita roca de Sant Gervàs.
Sierra de Sis, murallón que emerge altivo desde el Coll del Vent.
Acoge varias vías de Christian y Bunny, una banda de franceses nómadas que pobló las paredes de rutas impresionantes a fines de los noventa, en un estilo precario que combinaba el artifo con el libre expuesto y atrevido sin importar la calidad de la piedra
Atraído por las reseñas que publicaron, intenté repetirlas -no recuerdo cual- hace más de 20 años. Un largo de 6a descompuesto me echó para atrás.
Regresé hace un tiempo para "frikear" varias rutas de deportiva de Soperuny equipadas por Baronauer, el auténtico experto de la zona. Oriol ha repetido todas las rutas francesas, o casi. No en vano es el patio de su casa. Bueno, el hort de su padre.
El sector nos resultó agradable. Avistamos de nuevo esos muros arrogantes que desafían a todo escalador.
Hace pocos días Oriol me comentó que acababan de abrir dos rutas buenas y lo anoto en mi carpeta de pendientes.
El lugar me continúa fascinando: Alejado, salvaje y nada frecuentado por escaladores.
Así que de inmediato le damos una nueva oportunidad.
Escogemos El Hombre y la Tierra, ruta abierta por Oriol, Martín y Guillem,
Nos ha encantado, y constatamos que el ojo entrenado es capaz de descubrir oro entre la mena, filigrana en los derrumbes.
Vertical, atlética y sobre una piedra sorprendente mezcla de Riglos y Collegats, siempre buena, a tramos excelente a condición de no extraviar la línea.
¿ O quizás mi querido Port tergiversa mi juicio, mi capacidad de valorar objetivamente la calidad del conglomerado, y me regocijo sobre cualquier tipo de piedra ?
Quizás...
A lo peor yerro y Sis sólo alcanza de bueno a mediocre.
Me da igual. El conjunto del paisaje con la línea, la aproximación con el descenso y los pueblos con sus gentes, convierten la visita en una experiencia única y muy recomendable.
Un lugar donde todavía resuenan los ecos de un programa legendario con sus conflictos entre lobos y hombres. Disputas que sobreviven y proliferan a merced de las normas dictadas por una Europa imbuida de un ecologismo de despacho, absurdas a ojos de los habitantes del campo que pretende regular. Discrepancias y choques que ya apuntaba un genial (aunque cuestionado hoy) Félix Rodríguez de la Fuente
Notas de interés
Escalada al sol de mañana (cara Este, lorenzo hasta las 13.30). La zona está expuesta al viento, a una altura de 1500 mts. Incluso en verano, si corre el aire y estás a la sombra, se está fresco.
Aconsejable traer los totems del azul al rojo. Os resolverán alguna duda, y os aliviarán algún aleje.
Si disponéis de 4x4 varias pistas permiten alcanzar el Coll del Vent.
De allí, la aproximación se reduce a 25 minutos, siguiendo una antigua cañada real que todavía usa algún pastor. La Cañada coincide con el GR18 y flanquea la base de las paredes para el deleite de cualquier escalador
Con motorizaciones clásicas (furgoneta ligera o alta) quizás podáis llegar a apenas 300 mts del Coll del Vent por el camino que parte de Cajigar.
Más conservadores, nosotros optamos por aproximar desde Riguala de Serraduy (asfaltado hasta Riguala), de donde parte una pista en estado variable que te sube al Coll de Vent. Las últimas paellas vencen 200 mts de desnivel, están parcialmente cementadas y presentan un par de zonas complicadas para vehículos normales. Aparcas antes de esas paellas, cuando juzguéis que vuestro vehículo ya sufrió bastante, y en 30 minutos alcanzas el Coll del Vent.
Esta opción combina de maravilla con una cena en el Hostal Peix de Serraduy, restaurante de comida casera, o en cualquier otro de la zona de Isábena
El descenso se realiza yendo a buscar la Cañada Real, también sendero GR . De la cima flanquear en descenso hacia el NorOeste, muy evidente, hasta la Cañada, 10 minutos. De ahí a pie de vía en otros 10 minutos, y luego ya al coche.